Cómo prepararte para una entrevista virtual vs. presencial. ¡Claves para cada modalidad!

En el entorno laboral actual, las entrevistas de trabajo han evolucionado significativamente. Hoy en día, muchas empresas optan por entrevistas virtuales para agilizar los procesos de selección y adaptarse a una era digital. Sin embargo, las entrevistas presenciales siguen siendo preferidas por otras muchas empresas. En B4work, queremos ayudarte a destacar en ambas modalidades. Aquí te compartimos algunos consejos prácticos para prepararte tanto para entrevistas virtuales como presenciales y así aumentar tus posibilidades de éxito.

1. Preparación técnica vs. preparación de presentación. Para una entrevista virtual, la preparación técnica es fundamental. Asegúrate de tener un equipo adecuado: un dispositivo con buena conexión a internet, auriculares (si es necesario) y un espacio bien iluminado y ordenado que proyecte profesionalidad. Comprueba la plataforma de la entrevista con antelación (Zoom, Teams, Google Meet, etc.) y familiarízate con sus funciones básicas, como activar y desactivar el micrófono y la cámara, compartir pantalla y silenciar notificaciones. Este tipo de preparación evita retrasos y te ayuda a proyectar una imagen de confiabilidad y competencia técnica.

En una entrevista presencial, aunque la tecnología no sea la protagonista, tu presentación personal cobra mayor relevancia. Opta por una vestimenta adecuada a la cultura de la empresa y al puesto al que postulas; es preferible pecar de formal que de informal, especialmente si tienes dudas. Procura llegar con al menos 10-15 minutos de anticipación, pues la puntualidad es un aspecto clave que las empresas valoran mucho en los candidatos. La primera impresión cuenta, y en una entrevista presencial tienes la oportunidad de demostrar seguridad desde el primer momento.

2. Lenguaje corporal y comunicación. En una entrevista virtual, el lenguaje corporal se percibe de forma distinta debido a las limitaciones de la cámara, por lo que es esencial ser consciente de ello. Mantén la mirada hacia la cámara en lugar de la pantalla para simular contacto visual, y siéntate en una posición erguida pero cómoda. Un pequeño truco es tener una ligera sonrisa para transmitir cercanía y evitar gestos bruscos que puedan parecer exagerados a través de la pantalla. Hablar con claridad y en un tono moderado también es importante, ya que el sonido puede distorsionarse.

En las entrevistas presenciales, el lenguaje corporal completo juega un papel esencial. Desde el apretón de manos hasta la postura, cada gesto aporta a la imagen que el entrevistador tendrá de ti. Evita cruzar los brazos o mirar hacia abajo; en su lugar, mantén una postura abierta y amigable. Escucha activamente al entrevistador, asiente y mantén el contacto visual para demostrar interés y compromiso.

3. Preparación de respuestas y práctica. Para ambos tipos de entrevista, es fundamental preparar las respuestas a preguntas comunes y relevantes para el puesto. Investiga sobre la empresa, sus valores y el perfil del puesto, y utiliza la técnica STAR (Situación, Tarea, Acción, Resultado) para estructurar tus respuestas a preguntas sobre experiencias previas.

Sin embargo, en una entrevista virtual, puede ser útil tener una “chuleta” discreta fuera de cámara con puntos clave para recordar. No abuses de esta herramienta y úsala solo como referencia en caso de necesitar un recordatorio rápido. Ensaya algunas respuestas en voz alta y grábate si es posible, ya que esto te permitirá identificar áreas de mejora y te ayudará a acostumbrarte a hablar ante una cámara.

Para la entrevista presencial, la práctica debe centrarse en responder de forma natural y mantener la fluidez en la conversación. Los entrevistadores buscan evaluar cómo interactúas en persona y tu habilidad para adaptarte a un entorno laboral real, por lo que es importante ser auténtico y demostrar interés genuino. Considera realizar un simulacro de entrevista con un amigo o familiar que pueda darte retroalimentación.

4. Cierre de la entrevista. Al finalizar ambas modalidades de entrevista, agradece siempre al entrevistador por su tiempo y la oportunidad. En una entrevista virtual, asegúrate de hacer una pausa breve antes de cerrar la llamada, mostrando tu disposición para resolver cualquier duda adicional. No cierres la sesión abruptamente y, de ser posible, espera a que el entrevistador finalice la reunión primero.

En una entrevista presencial, el cierre incluye tanto palabras como gestos. Un apretón de manos firme (si es apropiado) y una sonrisa para despedirte de manera cordial son claves para dejar una buena impresión final. También, puedes aprovechar para preguntar sobre los próximos pasos del proceso de selección si el entrevistador no lo menciona.

En B4work estamos aquí para apoyarte en cada etapa de tu búsqueda laboral. ¡Prepárate, confía en tus habilidades y da el siguiente paso hacia tu futuro profesional!

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